Diciembre 2015.
Sinopsis
Anna (Felicity Jones), una joven
británica que estudia en la universidad de Los Ángeles, se enamora de Jacob
(Anton Yelchin), un joven norteamericano, pero ambos se ven obligados a
separarse porque a ella no le renuevan el visado para permanecer en los EE.UU.
Regresa entonces a Londres, de modo que la pareja se ve obligada a mantener su
relación a distancia. (FILMAFFINITY)
Reseña
Vi el trailer, me copa la actriz, pintaba una historia de amor con
complicaciones. “Listo, película de mi estilo” pensé. No estaba del todo
equivocada, pero tampoco totalmente acertada. Muchas de las últimas películas
que ando mirando de este estilo me están decepcionando. No sé si es que siempre
busco lo mismo rosa, o que estoy teniendo un continuo fallo en mi juicio al elegir
películas, pero hay algo que no me está cuadrando.
No puedo decir que haya sido una mala película, porque en casi su mayoría
me agradó (y no digo me encantó porque realmente no llega a tanto ni por
casualidad). Mi mayor problema es el final, pero vayamos por partes (así como
dijo Jack “el destripador”. Sí, chiste malo que se me pegó de mi papá). Empieza
siendo la historia bonita de dos jóvenes que se enamoran en la universidad:
miradas, sonrisas, flechazo, love. Al principio todo un poco más inocente y a
media que avanzan los primeros minutos se ve un amor más intenso. Y ahí pum,
primera equivocación. Hasta yo que nunca viajé (por desgracia, pero sé que es
solo por ahora) sé que no podes violar un plazo de la Visa, y menos en US. Ese fue
un error demasiado idiota, pero bueno, quise creer que las cosas no iban a seguir
en picada desde ahí (y esa fue mi
primera equivocación). Parecían tener un amor fuerte, pero siempre que estaban
juntos se demostraban casi todo lo contrario. Después de varias idas y venidas
ya no entendía nada. Porque para peor, había terceros en el medio que salían
perjudicados.
Por supuesto que yo quería que terminases juntos, pero al fin de cuentas
era más capricho que amor. Llegando al final (cuando ella finalmente vuelve a
US) su cara no transmitía amor, y no es que me esté quejando de la actriz,
porque eso habrá dicho el guión, y de eso mismo es lo que me estoy quejando.
¿Era necesario un final abierto? Creo que prefiero un final triste a uno
abierto. Uno triste te hace chocar con la realidad, uno abierto te hace creer
(muchas veces) que al escritor/guionista simplemente se le acabó la tinta, se
le secó el cerebro, algo.
Y vuelvo a reflexionar conmigo misma. Viendo cómo iba la historia quizás no
está del todo errado el final abierto, pero creo que mejor que ese plano de
ella quedándose sola en la ducha prefería uno de ella sola en un aeropuerto. La
ducha me hace pensar que quizás se queda en US e intenta hacer que todo
funciones, o con toda su actitud, tranquilamente puede volver a UK y ambos
continuar con la histeriqueada por el resto de sus días.
No sé, repito que no me encantó. Analizándola simplemente me hace pensar. Yo
creo en eso que se llama amor –de pareja- (aunque no lo viví en primera persona
aún). Pero insisto en que lo que muestran en este film parece más un capricho
que amor. Y que no se confunda lo uno con lo otro, porque lo primero puede
superar cualquier obstáculo cuando es verdadero, lo segundo probablemente te
hará tener una vida miserable.
En fin, le doy 2 estrellas sobre 5, quizás 2.5, pero no más que eso. Para pensar,
pero con un gran sabor amargo.
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